Límites de la aplicación del coste marginal (II)

Elegir entre un método u otro para el cálculo de costes dependerá de:

El tipo de producción

En el caso de una producción en proceso continuo donde lo esencial de la actividad está basado en un equipo indivisible y muy costoso (grandes inmovilizados), el marginalismo se aplica plenamente.

Pero, para la mayor parte de las empresas, donde el equipo es fácilmente divisible y se puede despreciar, salvo para muy corto plazo, el concepto de costes fijos, no existe un fundamento objetivo, y el marginalismo no está fundado más que exclusivamente en la preferencia subjetiva que conduce al utilizador del nuevo sistema a prescindir de ciertas posibilidades de acción (tales como las posibles ventas o compras de activos, la subcontrata, la dilatación o concentración de todos los servicios indirectos...) al haber decidido desconocer sus costes totales. La aplicación exclusiva del marginalismo en la construcción mecánica (por poner un ejemplo), de equipo fácilmente divisible, está claro que parece una aberración. Es decir, la estructura (más o menos fraccionaria) de los gastos fijos y la posibilidad (más o menos fácil) de programar son condiciones que justifican o invalidan la utilización de los costes marginales.

El tiempo

Es cierto que a corto plazo y para una situación de mercado bien definida el esquema de coste directo es más real. A medio plazo, el esquema de coste completo puede constituir (dentro de ciertos límites) una aproximación aceptable del coste marginal a largo plazo, y de esta manera, orientar mejor las decisiones comerciales.

El cálculo del precio de coste completo es en todos los casos indispensable para fundamentar la política de venta a largo plazo.

La fijación de los precios de venta sin tener en cuenta los precios de coste completos no es más que una acrobacia a corto plazo. Para el largo plazo, no se puede establecer una política de precios de venta sin conocer los precios de coste completos, sin exponerse a la destrucción su empresa.

La referencia a los precios de mercado y la posición de la empresa en el mismo

Se comprende fácilmente cómo intervienen los precios del mercado en caso de competencia o de mercado monopolístico.

Si la empresa se encuentra en una situación de imposición de uno para unos productos más que para otros, en los primeros empleará sin duda el método de coste completo. Por supuesto, el conocimiento de la elasticidad (variación porcentual de las ventas respecto a una variación porcentual del precio) de los precios de mercado, le permite jugar de tal modo que el conocimiento de sus costes marginales le permita hacer máximo el rendimiento o utilizar sus costes completos a fin de no alterar la estructura del mercado.